73 maltratadores y agresores sexuales recibieron asistencia psicológica en 2007

Este recurso institucional pretende corregir los comportamientos agresivos
El crecimiento de la demanda en un 15% ha hecho necesario el refuerzo del servicio con un nuevo profesional

Varias mujeres en una protesta contra la violencia machista.Foto: efe

c. m. orduna

vitoria. En las situaciones de violencia familiar no sólo intervienen una o varias víctimas que sufren los brutales comportamientos de la personalidad cobarde o enferma que las agrede. El Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación alavesa tuvieron muy en cuenta este hecho a la hora de suscribir su convenio de colaboración del año 2000, fruto del cual también surgió un servicio gratuito para hombres que han agredido o agreden a sus familiares mediante el que se les ofrece tratamiento psicológico con el fin de corregir sus comportamientos agresivos.
Los agresores residentes en la provincia pueden acudir a este servicio por iniciativa propia, derivados por los servicios sociales de base, por orientación de las propias agredidas, así como por los órganos judiciales como alternativa o complemento a sentencias condenatorias. Sólo el 2% de los hombres que recurrieron a este servicio en 2007 lo hicieron por el primero de estos cauces. Y llama la atención el significativo aumento que se ha producido en el número de maltratadores que han sido derivados a este recurso desde el servicio social externo penitenciario, que a pasado a ser el lugar desde el que más pacientes se derivan, un 39%.
Los psicólogos atendieron durante el año pasado a un total de 73 maltratadores, 47 de los cuales no habían cometido delitos de este tipo -o al menos no se conocían- con anterioridad. De ellos, 43 ejercieron el episodio violento contra su pareja, tres contra su madre, y otro contra su hijo mayor de edad.
Del primero de estos grupos, la edad media del maltratador correspondió a los 41 años, el maltratado infligido fue físico en el 49% de los casos y psicológico en el 51% y en el 30% de estos casos existió extensión de la violencia hacia los hijos. Además, la mayoría de los agresores, nada menos que el 86%, no muestran comportamientos violentos fuera del hogar.
Este recurso es atendido mediante contratación indirecta y, desde mediados de 2006, se vio necesario reforzarlo con un nuevo psicólogo dado el importante crecimiento de la lista lista de espera, aproximadamente en un 15%: actualmente, dos profesionales atienden a los maltratadores en la sede de SEAVI, a donde se trasladó el servicio durante 2007.
Los psicólogos se afanan en ofrecer apoyo a los hombres que ejercen maltrato en el hogar o en el ámbito sexual incidiendo, básicamente, en el control de sus impulsos -especialmente la ira-, el abuso del alcohol, los celos patológicos, los estereotipos sobre el rol sexual -ideas sobre la inferioridad de la mujer-, el entrenamiento de la asertividad o las habilidades sociales de comunicación.