DEIA - 24-III-2007

Una anciana, primera víctima de la violencia de género de la CAV este año

Pilar Sampereo, de 74 años, murió apuñalada en Bilbao presuntamente por su marido, de 76, que más tarde se intentó matar clavándose el cuchillo

Lucía Mesado Bilbao

La lluvia caía intensamente sobre el número 16 de la carretera Zorrotza-Castrejana, en Bilbao, cuando Pilar Sampereo moría a causa de una puñalada en el cuello y otra en el corazón. Poco antes de las diez de la mañana los vecinos se agolpaban en la puerta del portal para despedir el cuerpo de Pilar que era sacado por los servicios funerarios del domicilio donde compartió la vida con su asesino.

Pilar Sampereo, de 74 años, se ha convertido en la primera víctima de la violencia machista en la Comunidad Autónoma Vasca en lo que llevamos de año. Todo apunta, según el relato que ayer realizó la Ertzaintza, a que su marido, Domingo Llarena, de 76 años, fue el autor de las cuchilladas que acabaron con su vida. Y como en muchos otros casos de violencia de género, éste también intentó quitarse la vida. Una cuchillada en el pecho poco efectiva le condujo al Hospital de Cruces en calidad de detenido. «Ha tenido que ser un arrebato», opinaba un atónito un amigo del anciano de 76 años.

El derramamiento de sangre en el 5ª G del portal dieciséis no pasó desapercibido. «Nadie piensa que esto pueda suceder en frente de tu casa», comentaba una vecina del matrimonio. Una carta del banco asoma burlonamente por el buzón de la familia y recuerda que la vida sigue a pesar de lo ocurrido.

Los vecinos y curiosos comentaban que él era natural de Espinosa (Burgos) y ella, cántabra, de Santoña, aunque llevaban media vida viviendo en Bilbao. La gente del barrio, todavía conmocionados por la noticia, los consideraba a ambos «buenas personas, unos trabajadores». Domingo llevaba varios años jubilado, pero había pasado gran parte de su vida trabajando en la fábrica de Etxebarria mientras su mujer criaba a los dos hijos fruto del matrimonio. «Yo mismo lo saludé ayer, a mi me parecía un hombre algo callado, pero bueno», dice otro vecino.

Fuerte discusión previa

La Ertzaintza, que ha iniciado una investigación para tratar de esclarecer las circunstancias que llevaron a Domingo a asesinar a su esposa, en sus primeras declaraciones recogidas entre los vecinos del edificio, asegura que previamente al suceso éstos habían escuchado una fuerte discusión entre la pareja. Según algunos de estos testigos, el presunto asesino podría estar en tratamiento por depresión.

El hombre se encuentra en estos momentos custodiado en el hospital de Cruces tras ser intervenido quirúrgicamente, pero su vida no corre peligro, según informó el centro hospitalario.

Con esta muerte, ya son quince las mujeres asesinadas a manos de sus parejas y ex parejas este años en el Estado español, mientras que durante 2006 fueron 68 las mujeres que perecieron en estas circunstancias, según el Instituto de la Mujer.

Entre las quince mujeres asesinadas a manos de sus parejas o ex parejas, la Delegación del Gobierno contra la Violencia sobre la Mujer ha decidido no incluir a la mujer a quien su marido mató con un hacha el pasado 17 de febrero en Toledo. El argumento utilizado es que el agresor mató por enajenación mental, y en el acto usó el mismo arma también para asesinar a su madre y a su hijo, además de herir a otras dos de sus hijas.

En el balance a lo largo de 2007 se da la circunstancia de que sobre dos de los agresores pesaban sendas órdenes de alejamiento sobre las víctimas, mientras que un tercero había sido detenido en 2004 por agresión.

Hay que remontarse al pasado mes de julio para encontrar el último caso de muerte debido a violencia machista en la CAV, con la joven de 23 años Loredana Andriescu, asesinada en Basauri por su pareja, una vez más, a cuchilladas.