14.10.07

LA VIOLENCIA Y LOS HOMBRES


Queridos compañeros,

Este fin de semana me ha tocado vivir y padecer muy de cerca la violencia gratuita de un hombre extremadamente agresivo y peligroso contra una persona muy querida que también es hombre, pero pacífico y buena gente. Lo escribo en el blog porque me parece interesante para nuestros temas, pero también porque me está haciendo daño la rabia que me provoca esta situación y me hará bien compartirlo con los amigos igualitarios y pacíficos que nos encontramos en este espacio.

El escenario ha sido una vez más Alegría-Dulantzi, el pueblo en el que nací y crecí. El viernes por la tarde estaba mi hermano mayor y su compañera paseando por las afueras del pueblo con sus dos pequeñas mascotas, que, todo hay que decirlo, son muy jugetonas y molestonas. En este paseo, los perritos (un carlino y un pequeño e huidizo fox) ladraron a un perro de presa canario (no se si os hacéis a la idea de que tipo de perro se trata). En ese momento, el dueño del presa canario lo soltó y amenazó con matar a los perros. Mi hermano le respondió que ni se le ocurriera y sin mediar palabra el otro indivíduo le empezó a golpear, tirándolo al suelo, volando las gafas y sangrando del labio por uno de los puñetazos.

Inmediatamente mi hermano me llamó por teléfono presa del pánico para comentarme lo ocurrido. Yo casualmente estaba localizable y en Dulantzi, por lo que en un minuto llegué al lugar donde había ocurrido la agresión. En el camino llamé a otro hermano que apareció con un sobrino, por lo que ya estábamos allí 4 hombres. Pasé un miedo terrible, por la ira que me producía la rabia, pero sobre todo por cómo planeaba en mi cabeza la posibilidad de utilizar la violencia como recurso. Lo aprendido frente a mis convicciones pacifistas y no violentas.

Inmediatamente llamamos a la Erzantza, que puso en camino hacia Dulantzi una patrulla. Mientras tanto apareció el agresor con su perro. Un joven con la cabeza rapada, estética militarista, y dejando a las claras su preparación física. En este caso, no se paró, pero dejó a las claras que nos retaba. A los 5 minutos regresó sin el perro a esperar a la Ertzantza. Mientras lo hacía utilizaba los árboles y señales de tráfico como sparring para sus patadas y puñetazos, y mientras también aprovechó para llamar a algún amigo para, divertidamente, contarle su gesta.

Yo no daba crédito. Al llegar la patrulla les relató que él estaba "cumpliendo con las normas, porque llevaba el perro atado". Para él la agresión no había sido tal, sino que era algo así como la justicia que él se había encargado de impartir, porque mi hermano no llevaba los perros atados...

El próximo martes se celebrará el juicio rápido, y ya os contaré qué pasa. Por otro lado, ahora nos hemos ido enterando que son muchas las personas que han sido agredidas o amenazadas por este energúmeno. Pero nadie ha hecho nada. Incluso un hombre pasó 3 meses sin salir de su casa después de haber sido agredido.

Entiendo que este es un caso extremo de un hombre peligroso y violento, pero que de algún modo, representa un modelo de masculinidad muy ligado a la legitimación de la violencia. Aunque quizás lo más alucinante es cómo ese debate se abre también en los hombres que estamos por la paz, la no violencia y la igualdad. Yo lo he sentido como una especie de monstruo moral y vengativo que vive dentro de mi (monstruo aprendido y modificable).

Pero me quedo con otra cosa. En todo momento, mis hermanos y yo realccionamos de forma tensa pero serena, tratando de evitar en todo momento la violencia. Todos nosotros teníamos claro que nosotros no somos así. Pero después hemos tenido que hacer un esfuerzo, para racionalizar las cosas y pasar algunas noches gestionando la rabia, el miedo y el asco que nos produce la violencia. El día podría haber terminado en tragedia, pero logramos que no fuera así.

Gracias por vuestro tiempo amigos y amigas de la bogosfera.

Nota: prejuiciosamente pensé enseguida, que el individuo en cuestión sería guarda jurado...(con todo mi respeto para los compañeros y compañeras que malviven en estas empresas), y lo es.

Nota 2: he puesto una imagen del perro en cuestión para que os hagáis una idea del impacto estético que produce un animal como este, en manos de un dueño como aquel, aunque quiero dejar claro que el perro nada tiene que ver con lo ocurrido, pobre.

Salud y abrazos.

3 comentarios:

Gaizka dijo...

Gracias Ritxar por expresar como te sientes y desde luego que no es agradable encontrarse cara a cara con la violencia, que ejercen estos especimenes de "Rambo". Aunque me duele saber el daño que estará haciendo a aquellas personas de su entorno, también siento lástima porque este tipo no sea capaz de gestionar sus sentiientos y arroje su ira contra cualquiera.
Me parece que habéis actuado con cabeza en el momento, y ahora es positivo que habléis con los sentimientos: sobre cómo os sentís y el miedo que nos producen estas situaciones...
Ánimo y un fuerte abrazo

hojalata dijo...

creo que la mejor forma de enfrentrse a la violencia es la que habeis tenido, manteneros serenos y firmes, es dificil lo sé pero es la forma de demostrar que se uen solucionar los conflictos e forma racional.
Es imporante dar a conocer estas actitudes de forma enérgica y con bastante "bombo" psrs que el supuesto hombre o más bien macho
sea puesto en evidencia en el pueblo.
Si necesitais algo aqui estamos para lo que haga falta.
Un abrazo.

Ritxar dijo...

Mil gracias por vuestros comentarios y el calorcico que se siente con ellos.

Salud y abrazos

Ritxar